El Sistema Económico Latinoamericano y del Caribe (SELA) conmemora, durante este mes de octubre, su 50° aniversario, una fecha propicia para ratificar su compromiso con la integración, la cooperación intrarregional y el desarrollo económico y social de América Latina y el Caribe.
Creado el 17 de octubre de 1975, mediante la firma del Convenio de Panamá, el SELA nació como respuesta a la necesidad de establecer un sistema permanente de consulta, coordinación y cooperación entre los países de la región. En ese histórico acuerdo, suscrito por 24 Estados soberanos latinoamericanos y caribeños, se establecieron los principios de igualdad, soberanía, solidaridad, no intervención y respeto mutuo, que continúan guiando la labor del Organismo medio siglo después.
Durante estos 50 años, el SELA ha sido un referente regional en la articulación de políticas públicas, la promoción de consensos y el fortalecimiento de mecanismos de integración. Su vocación integradora se ha expresado en la construcción de una agenda regional de cooperación, actualmente enfocada en tres grandes ejes: Recuperación Económica, Digitalización e Infraestructura y Desarrollo Social, alineados con los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
La Secretaría Permanente del SELA ha sido el motor técnico de esta labor, transformando el diálogo en acción y construyendo puentes para el desarrollo. Bajo la guía de 13 Secretarios Permanentes, ha articulado una voz común ante el mundo, generando conocimiento estratégico para la formulación de políticas públicas, fomentado la cooperación Sur-Sur y liderado iniciativas de innovación y adaptación frente a los desafíos del siglo XXI.
Uno de los pilares del SELA ha sido la generación de conocimiento técnico. A lo largo de cinco décadas, sus publicaciones han sido una fuente de consulta indispensable para universidades, centros de investigación y tomadores de decisiones. Los libros y estudios del SELA abordan temas clave y de interés regional, como la inteligencia artificial y su impacto en las políticas públicas, la gobernanza tecnológica, la contratación pública en América Latina y el Caribe, la cooperación Sur-Sur, la integración económica regional, la diplomacia digital, la economía circular, la gestión de riesgos de desastres, el desarrollo sostenible y el fortalecimiento de las PyMEs.
En los últimos años, el SELA ha intensificado su trabajo conjunto con otros mecanismos regionales, consolidando una agenda intersecretarías que promueve la convergencia institucional y la cooperación técnica. A través de la Matriz de Convergencia Regional (MCR), se han identificado áreas de trabajo conjuntas, optimizando recursos y generado soluciones concretas para desafíos compartidos. Esta herramienta refleja una apuesta por una integración más madura, eficiente y humana.
El trabajo conjunto ha involucrado a organismos como la Asociación Latinoamericana de Integración (ALADI), Comunidad Andina (CAN), Comunidad del Caribe (CARICOM), Mercado Común del Sur (MERCOSUR), Sistema de la Integración Centroamericana (SICA), Organización del Tratado de Cooperación Amazónica (OTCA), Asociación de Estados del Caribe (AEC), Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América – Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP), Alianza del Pacífico y Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC).
En la actualidad, bajo el liderazgo del Embajador Lesly David, como Secretario Permanente electo en junio de este año, el Organismo continúa su proceso de renovación estratégica, para dar respuesta a los desafíos contemporáneos en el impulso de una región más resiliente, convergente y unida.
En este 50° aniversario, el SELA reafirma su misión de trabajar por una América Latina y el Caribe más integrada, donde la cooperación regional sea el motor para superar brechas estructurales, impulsar el desarrollo sostenible y fortalecer la voz de la región en el escenario internacional.